Bizcocho de Yogur con Manzanas y Avellanas

Desde luego para mí uno de los bizcochos más ricos y jugosos que podemos comer son los que están hechos con la base de yogur, salen tan jugosos que se deshacen en la boca al comerlos.
El de hoy lleva una mezcla de manzana y avellanas, esta mezcla de sabores nos ha encantado, Os cuento como lo hice.


Ingredientes para la masa:
3 huevos
1 vaso de yogur natural
1 vaso de yogur de aceite de girasol
2 vasos de yogur de azúcar
3 vasos de yogur de harina
1 sobre de levadura para hacer bizcochos
75 gr de avellanas (Trituradas)
4 cucharadas de zumo de limón
1 cucharadita de café de vainilla líquida
2 manzanas rojas pequeñas cortada a trocitos pequeños (pesaban entre las dos 175 gr, más o menos)

Ingredientes para poner encima del bizcocho:
2 manzanas rojas pequeñas cortadas
Avellanas troceadas
Un poco de azúcar.

Preparación:

Precalentamos el horno a 180 grados para luego bajarlo a 150 grados.
Si vuestro horno funciona mejor a 180 grados dejarlo en esa temperatura, como ya sabemos cada horno es un mundo.

Tiempo de cocción:
40 minutos.

Batimos los huevos junto con el azúcar, el yogur, el aceite, las 4 cucharadas de zumo limón y la vainilla, a continuación le echamos la harina tamizada junto con la levadura y seguimos batiendo, hasta que se integren por último le incorporamos las manzanas en trocitos pequeños junto con las avellanas molidas, removemos con una espátula o cuchara.

Forramos un molde con papel de horno si no es desmoldable, yo use mantequillla directa en el molde luego el papel (así se adhiere mejor y no se mueve), y volví enmatequilllar el papel de horno.

Echamos la mezcla en el molde y por encima le añadimos las 2 manzanas restantes troceadas y algunas avellanas más.
Yo corté las manzanas por la mitad o en tres partes y las marcamos como si fuera un abanico, espolvoreamos azúcar por encima de las manzanas. Troceamos unas cuantas avellanas y las esparcimos a lo largo del bizcocho. "Esta es una idea de las tantas que se pueden hacer·.
Comprobar que está hecho introduciendo un palillo, tiene que salir sin restos de masa.